¡Pequeños Gigantes!
Bichos, animalitos, parásitos, microbios una y mil maneras de nombrar a esos pequeños seres vivos, los Microorganismos. Pero ¿Realmente son tan malos como se dice?
Pues sí, efectivamente solo hemos visto la grafila de la moneda. A lo largo de la historia grandes pandemias han arrasado con la vida misma, entre ellas tenemos a la “peste negra” acabando con el 60% de la población europea en el siglo XIV. la introducción de la viruela a nuestro continente, dando el colapso del imperio Aztecas e Inca siendo un evento fundamental en la conquista de estos, “la gripe española “quien infecto a un tercio de la población mundial a principios del siglo XX.
Sin embargo, es importante aclarar y señalar que solo una diminuta fracción de los microorganismos son patógenos para el ser humano.
En su mayoría han sido el cincel de lo que hoy concebimos como vida, participando desde la formación y la sustentación de nuevos hábitats hasta el desarrollo de nuevos individuos. Pero viéndolo desde un punto de vista más antropocéntrico, se ha comprobado que los virus condujeron a la formación de genes implicados en el desarrollo de la placenta, por otro lado, las bacterias en nuestro cuerpo se encargan de regular numerosos procesos metabólicos como: la inflamación, inmunización, producción de vitaminas, absorción de nutrientes. Poseemos más bacterias que células humanas, nuestro genoma posee genes bacterianos.
La pregunta es ¿Que somos, humanos o bacterias? La respuesta es que en realidad somos todo, somos un cúmulo de un todo y nuestras acciones día a día determinan y afirman nuestro vínculo con el mundo microbiano, determinado que tanto este nos favorece o nos perjudica.
Paredes, Lammoglia, Santos, C. (2004). GACETA MEDICA DE MEXICO - 0016-3813 | MIAR 2019 live. Information Matrix for the Analysis of Journals. [online] Miar.ub.edu.
